Instalación de ventilación mecánica controlada
Inesma ha sido la encarga de la instalación de Sistemas de Ventilación Mecánica Controlada en el primer edificio de Andalucía construido bajo el lema Passive House. Son edificios que consiguen reducir en un 75% las necesidades de calefacción y refrigeración.
A continuación, os hablaremos sobre qué es la ventilación Mecánica Controlada y los tipos que existen.
Sistemas de ventilación mecánica controlada
La forma en la que se ventilan los hogares ha cambiado significativamente con el paso de los años. En los antiguos sistemas naturales, la renovación del aire de producía a través del tiro térmico.
Sistema VMC simple flujo
Debido a las nuevas normativas, la construcción de hogares más estancos y eficientes son muy comunes, promoviendo que el tiro térmico no sea suficiente para evacuar el aire viciado. Es aquí donde aparecen soluciones como la Ventilación Mecánica Controlada. Este tipo de ventilación está compuesta por diferentes elementos y una red de conductos que permite conducir el aire a través de la vivienda. De esta forma se garantiza la extracción de aire necesaria. Los elementos son:
- Bocas de extracción, situadas en los baños y cocinas que extraen el aire viciado generado en las diferentes estancias de la vivienda
- Ventilador de extracción, que genera la depresión necesaria para asegurar la circulación del aire
- Entradas de aire, ubicadas en las habitaciones y en el salón, que permiten controlar la admisión de aire nuevo en la vivienda.
Para obtener una mayor eficiencia, se puede optar por un sistema hidrorregulable, equipado con sensores de humedad tanto en las bocas de extracción como en las entradas de aire. El sistema hidrorregulable permite modular el caudal en función de la humedad. Por otro lado, estas bocas pueden incorporar un sistema de detección de presencia, que permite aumentar el caudal cuando se haga uso de la estancia.
Sistema VMC doble flujo
Los sistemas de doble flujo permiten obtener la mayor eficiencia de un sistema de ventilación. Las entradas de aire de la fachada, se sustituyen por una red de conductos que consiguen eliminar el desconfort generado por la entrada de aire directa en las estancias.
Es decir, lo que se consigue con los sistemas de ventilación mecánica de doble flujo es extraer el aire viciado desde los espacios húmedos (cocina o baño) e introducir aire limpio en cada estancia de la vivienda.
Los sistemas de doble flujo incorporan un recuperador de calor, con este recuperador, la energía contenida en el aire de extracción se cede al aire de admisión. Gracias a este proceso, se consigue atemperar el aire que se introduce en la vivienda reduciendo el consumo de energía.
Otra de las características principales, es que el equipo cuenta con filtros que reducen la presencia de partículas contaminantes en el aire de admisión. En estos sistemas, el aire circula por los conductos conductos gracias a un ventilador de impulsión, que introduce el aire limpio y filtrado en las zonas secas, evitando la entrada del ruido exterior y mejorando la calidad del aire interior.
El sistema de doble flujo podría considerarse como una de las soluciones más óptimas para el usuario, ya que trae consigo eficiencia, aislamiento, filtración y confort.